viernes, 1 de enero de 2010


Destripando la zanfona


La zanfona es un instrumento con un funcionamiento es similar al de cualquier otro instrumento de cuerda frotada como el violín pero con la peculiaridad que no lo hacemos sonar con un arco de mano y las cuerdas son pulsadas por un mecanismo distinto.

La zanfona consta de cuatro tipos diferentes de cuerdas:

1. Los bordones con un sonido grave e inalterable usado como acompañamiento armónico del mismo tipo que las gaitas.

2. Las cantoras o cantantes, son cuerdas finas hechas de tripa o metálicas, destinadas a interpretar la melodía mediante el teclado. La forma de obtener las notas en estas cuerdas es acortando su longitud por medio de la presión de unas pequeñas piezas en forma de hacha llamadas espadillas. Estas espadas están dispuestas una al lado de la otra, como en un piano, y cortan la cuerda al ser presionadas con los dedos.

3. La trompeta, mosca o perro es un bordón (o varios) especial encargado del acompañamiento rítmico posible a través de la transmisión de golpes desde los perros hacia la tapa de resonancia. La clave está en un pequeño puente movil que tiene esta cuerda. Cuando este bordón esta en contacto con la rueda y está produciendo sonido suena segun la nota que esta afinada, pero si damos un pequeño golpe de muñeca sobre el pomo de la manivela se produce, al estar el puente suelto, un sonido que algunos asemejan a un ladrido, otros a el zumbido de una mosca, y que es con el que lleva el ritmo.

4. Las simpáticas (de 4 a 12) situadas a pocos milímetros por encima de la tapa de resonancia, afinadas a diferentes tonos. Éstas vibran de forma natural sin pulsar ninguna tecla cuando coinciden con los tonos de las otras cuerdas produciéndose así una reverberación característica en el instrumento.

Los bordones, cantoras y trompetas suenan cuando el músico, con la mano derecha, hace girar la manivela y ésta, mediante una rueda de madera impregnada de resina, va fregando las cuerdas a modo de arco infinito. Las cuerdas, en la parte donde toman contacto con la rueda, están embutidas con algodón para transmitir la vibración a la caja de resonancia consiguiendo así un sonido uniforme.

Con la mano izquierda, el músico pulsa el teclado para lograr la melodía deseada. El teclado es un mecanismo simple compuesto por unas teclas de madera o hueso dividido a semitonos que vuelven por gravedad a su puesto sin resortes ni otros mecanismos. La afinación y número de cuerdas usada es hoy por hoy una cuestión de gusto o deseo personal de cada músico, pero podemos establecer un estándar formado por 2 bordones (Do 2 y Sol 1), 2 cantoras (Sol 3 y Sol 4) y 2 trompetas (Do 3 y Sol 2). Así es que a partir de esta configuración tradicional podemos llegar a escuchar zanfonas con 5 bordones, 4 cantoras, 4 moscas y 12 cuerdas simpáticas. El registro tradicional de la zanfona es el de un instrumento soprano, pero actualmente podemos encontrar las variantes: soprano, alto y tenor que van de 2 hasta 3 octavas.

Como otros requisitos técnicos del mismo instrumento, se han incorporado: unas cejillas automáticas para cambiar la afinación de los bordones y trompetas; trastes en pequeños mástiles debajo de los bordones y trompetas; y últimamente la amplificación mediante diferentes tipos de pastillas y sistemas. Esto abre una nueva era en el instrumento, pudiendo alcanzar niveles de guitarra, teclados y otros instrumentos que desde hace más tiempo gozan de poder incorporar el soporte electrónico para su modo de ejecución.

Otros nombres que tiene la zanfona son zanfoña en Galicia, gaita zamorana y gaita de pobre en Zamora, gaita de Rabil y zanfonía en Asturias, zarrabete en el País Vasco, viola de roda en Cataluña, rabil de manubrio en Palencia, vielle en Francia, hurdy-gurdy en paises de lengua inglesa, drehleier en alemán o ghironda en italiano.

Los siguientes vídeos fueron grabados en el Taller de Zanfona que impatió Patrick Bouffard dentro de la programación del XIV Festival Internacional Folk Plasencia 2009: